sábado, 16 de abril de 2011

DE MAYOR QUIERO SER "AVARICIOLOGO".




La consulta del “avariciologo”, estaba siempre repleta de pacientes, con traje y corbata, buscando remedios a sus males.
El médico, que luchaba contra la avaricia, les ofrecía su tratamiento a cambio de considerables sumas de dinero.
Cuando el doctor cerraba la consulta, recogía el fajo de billetes y, sin contarlos, se dirigía a su casa. Allí su mujer le esperaba desnuda frente al fuego de la chimenea.
Él entraba despacio. Echaba todo el dinero a la hoguera y comenzaba a hacer el amor hasta que el sol empezaba a golpear los cristales de la ventana.

1 comentario: